domingo, 6 de agosto de 2017

Venezuela en el umbral de un abismo.

Tal como el gobierno de Canada lo ha denunciado, el primer acto de la llamada Asamblea Constituyente instaurada por el gobierno de Maduro fue destituir a la Fiscal General de Venezuela. Esto es la consumacion del fin de la separacion de poderes y establece un estado dictatorial donde el poder judicial esta intervenido por el poder ejecutivo y el poder legislativo, la Asamblea Nacional, de mayoria opositora es desconocida y desacatada por el gobierno. Tal como la presidenta Bachelet de Chile lo señala, este es otro paso en la interrupcion de la gestion democratica. La inmensa mayoria de los paises del mundo repudian los hechos y acciones del gobierno de Maduro. Algunos de los pocos paises que apoyan a Maduro tienen una larga, muy larga historia de igual atropello a su propia constitucion y completa usurpacion de los otros poderes del estado. Los Califas y Ayatollas del mundo se permiten apoyar quiebres democraticos en Venezuela.Ellos, en cuyos paises jamas ha habido respeto por la oposicion ni por la justicia , ni por las mujeres y menos por la libertad de expresion. Maduro despotrica contra la presidenta Bachelet y le enrostra la aun existencia en Chile de una constitucion pinochetista. Le contesto a eso al presidente Maduro: Señor Maduro, en Chile aun existe una constitucion pinochetista porque en Chile aun se respetan los poderes del estado y se respeta a la oposicion. Se podra cambiar esa constitucion cuando la mayoria de los chilenos y su poder legislativo lo permitan. El gobierno de Bachelet hizo un gran esfuerzo para conseguirlo. Si el gobierno de Bachelet siguiera su camino señor Maduro, habria desconocido al parlamento, habria llamado a una asamblea constituyente con sus solos partidarios, habria cerrado las puertas de los tribunales con efectivos del ejercito y tendria Chile una nueva constitucion a la medida del gobierno. Pero ese no es el camino ni la forma de la democracia chilena y yo me alegro de ello porque de eso ya tuvimos bastante. A quienes desde afuera de Venezuela siguen aplaudiendo el quiebre democratico en ese pais les recuerdo que la casi totalidad de chilenos y otros exiliados en Venezuela, fueron recibidos y amparados por los gobiernos democraticos de Venezuela y no por Chavez ni Maduro. Todos vivimos y disfrutamos una existencia de tranquilidad y democracia en nuestros respectivos paises. Podemos pensar y decir lo que queremos. No contribuyamos a condenar al pueblo venezolano a una larga y tenebrosa dictadura solo por satisfacer fenecidos sueños de utopias que se desvanecieron. Aun hay tiempo de buscar un camino para que esas utopias se desarrollen de manera distinta, con libertad y respeto por todos y sin dictaduras que duren setenta, cincuenta ni cuarenta años a costa de los mas elementales derechos y bienestar de sus pueblos.

sábado, 5 de agosto de 2017