Otra vez las Damas de Blanco y sus crímenes.

Queridos Lumumberos !

                                          El frustrado desfile de las Damas de Blanco en la Habana, me recuerda un poco la famosa revolución cultural de Mao en China. No fue necesaria la intervención de las “fuerzas de seguridad y del orden” de la isla, puesto que hordas fanatizadas Castristas les cerraron el paso con gritos e insultos, sin agredirlas fisicamente, sin embargo. Y no me vengan a decir que se trata aquí de expresiones espontáneas de apoyo al régimen de Raúl y Fidel Castro. La “contra” manifestación de los jóvenes Cubanos fue concebida desde Marzo de este ano y se usa como punta de lanza para evitar que la prensa extranjera eleve al primer plano de la noticia en el extranjero. Se trató aquí de 10 mujeres vestidas de blanco y no de una muchedumbre anti régimen. Reclaman, como es sabido, la libertad de sus familiares detenidos y condenados a altas penas de cárcel, en el 2003. Desde entonces marchaban una vez por semana por una avenida Habanera, aceptada por las autoridades de la Habana a reganadientes, pero que desde que las marchas se hicieron diarias a partir de Marzo de este ano, fueron prohibidas.  No es fácil aceptar que a un familiar lo condenen a 28 anos de cárcel, sin haber cometido un crimen contra la humanidad. Pero eso de los crímenes contra la humanidad es un criterio discutible en el “socialismo”. Para los hermanitos Castro es un crimen que alguien se manifieste en contra del régimen “socialista” de Cuba o por la falta de todo lo imaginable en la mesa de los Cubanos normales. Les recuerdo que cuando alguien decía en la URSS que el régimen soviético era una dictadura, pasaba derechito a un hospital psiquiátrico. Lo palpé personalmente en Moldavia. Un distinguido héroe de la Unión Soviética comentaba el arresto de un trabajador del Gosplan de Moldavia en 1970, por haber aparecido con un cartel en el cuello frente a la casa del gobierno Republicano que rezaba : “abajo la injusticia de los dictadores” !. Me enteré más tarde que lo habían borrado de las listas de espera de un departamento y en su lugar apareció el nombre de un miembro del partido, colega suyo, sin haber optado nunca a una nueva “kbartira”. Vivía con su madre paralizada en el piso 13 de un edificio que solo se mantenía en pié por la gracia divina, con varias otras familias más. En su comentario, este héroe de la guerra patria decía que lo menos que podían darle a este “granuja”, era perpetua. Pero que en conocimiento de su tragedia personal, era aceptable un par de anos en el hospital psiquiátrico de Kischinov. Al final de cuentas se trataba de un enfermo mental. Pasaron los anos antes que me diera cuenta que se trataba de una salvajada sin nombre. Solidariamente estuve con el condenado, aunque me tragué la barreta de que se trataba de un enfermo mental. No me cabía en la cabeza que alguien, en conocimiento de lo que se tejía en el país, saliera con un cartel colgado al cuello de ese calibre. El mundo ha cambiado sensiblemente desde aquel entonces. No existe la URSS y quien protesta contra los oligarcas de la Federación Rusa, no van ya a parar al hospital psiquiátrico, sino que directamente al cementerio. Debe ser que de repelente le echo “conlolla” cuando me refiero a Rusia, pero si nos enteráramos realmente de lo que allí sucede, muchos de uds. tendrían a lo mejor la misma postura. En cuanto a Cuba, todo marcha sobre ruedas, si leemos los pasquines revolucionarios. Los indicadores económicos y sociales de la isla ya la dejan por sobre Estados Unidos de América y sobre las naciones de bienestar de Europa occidental. Un fuerte abrazo a todos, con la fraternidad de siempre.

René

Alemania, 19.04.2010.-