miércoles, 16 de noviembre de 2022

La guerra contra Ucrania. Por Rene Ronda

 Queridos amigos:

                                                   La guerra de rapiña del fascismo Ruso está llegando a un penoso final. La soldadesca Rusa, contrariamente a las epopeyas que se cuentan del ejército rojo, no da pié en bola. Según fuentes de observación inglesas, al primer día de incursión de las hilachas de la reserva, es decir,  de los pocos que llegaron al llamado de la tristemente célebre comandancia del ejército Ruso, se registraron 600 reservistas muertos en el frente de batalla, en UN SOLO DÏA. Por una parte puedo entender la postura de los que no escucharon los llamados de la jefatura militar del contubernio Nazi Ruso y se dieron  la fuga. Ya no existen combates reales entre los soldados de Rusia y Ucrania. Más bien los combates se dan entre la artillería Rusa pertrechada con granadas y cohetes de Irán, Corea del Norte y en parte con dones de Turquía (NATO ??), contra la artillería de Ucrania, material antiaéreo de países amigos de Ucrania y otros elementos de defensa de naciones que no soportaban las ventajas del enorme material del entonces ejército soviético, contra una nación invadida, militarmente en desventaja. Se demostró, sin embargo, que el ejército de Ucrania se alzó como un gigante frente al agresor Nazi. Los pueblos de Europa y del mundo nunca olvidarán esta invasión, matanza y deterioro de la infraestructura de la población civil de Ucrania. Los reporteros de todo el mundo han eternizado la cobarde agresión y la destrucción de viviendas, hospitales, guarderías y asilos de ancianos de una nación Europea. Antes, en el pasado remoto,  había partidos políticos y movimientos ciudadanos que no se podían imaginar un proceso de paz sin la participación de Rusia. La palabra de esa enorme nación no vale en la actualidad ni un solo centavo. Lo mismo las iniciativas de paz que podrían venir de Rusia no tienen ningún valor. El pequeño tirano y sus seguidores ahora son el hazmerreír de sectores de la oligarquía Rusa. Lo acusan de hacerse en los pantalones, escondido en algún Bunker del interior, por no utilizar armas Nucleares contra Ucrania. Como si esta acción debería quedar sin reacción de las potencias nucleares occidentales. Esto último lo recogí de la TV de Rusia, en los debates civiles de sectores irresponsables en dos canales que probablemente serán en el corto plazo clausurados. Siguen los aplausos de la mal llamada izquierda latinoamericana a favor del fascismo Ruso. Personalmente los he declarado enemigos de la humanidad, cómplices de un  contubernio cobarde y artero. Sus arengas anticapitalistas suenan como tarro mantequero, si consideramos que China y Vietnam, son ahora naciones capitalistas. Socialistas son solo Cuba y Corea del norte. Que cada cual saque alguna conclusión de este paisaje. El triunfo de Lula de Silva en Brasil, da alguna esperanza a los pueblos del mundo. Un fuerte abrazo. René Ronda,03.11.2022.-

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