domingo, 29 de marzo de 2009

Poderoso caballero.....en Chile.

¡Viva Sebastián Piñera!

Por Antonio Gil

Estamos de acuerdo con usted, Piñera: es estupendo este sistema de acumulación de riqueza. Es totalmente insuperable, porque pone las cosas en su lugar. A usted, por ejemplo, lo puso en el lugar 701 de la nómina del Club de los Billetes de Goma.

El tan esperado ranking anual de archimillonarios, recién publicado por la revista "Forbes", trae una noticia sensacional para nosotros los chilenos. Un notición como para saltar en una pata y descorchar champaña. Un dato que nos debiera llenar de genuino orgullo. No entiendo por qué no sonaron bocinas ni se juntó gente en la Plaza Italia para festejar. Ni comprendo el mezquino silencio que ha rodeado este triunfo en el que, de una u otra forma, todos hemos puesto nuestra gotita de sangre. Allí, en esa recién salida publicación, nuestro crédito en estas lides, Sebastián Piñera Echeñique, el presidenciable dueño de unos bracitos cortos pero una codicia más larga que los hermanos Karamasov, subió, ¡en sólo 365 días!, nada menos que 196 peldaños en la lista de los millonarios más millonarios del mundo. Y esto, pese a que el año 2008 perdió 300 millones de esos lindos papelitos estampados con el adusto retrato de George Washington. ¡Bravo Piñera, no se nos muera nunca! Siga dándonos estas satisfacciones que nos permiten sacar más pecho que la señora Marlene Olivarí. Al lado suyo, preciado Piñera, Larraguibel y su caballo volador, el "Chino" Ríos, la Bolocco, Massú, Matta, Arrau, y hasta el pesado del guatón Neruda o esa vieja zapatona del Valle del Elqui son unos auténticos papanatas. Usted, Piñera sí que sabe lo que es ganar de verdad posiciones importantes, que honran a su patria y enorgullecen a sus familiares y amigos. Ganar en metálico y no medallitas, copas y otros premios pelotudos. Usted sí que es un ejemplo que debieran seguir esos millones de idiotas que se conforman con meterse al bolsillo 300 dólares al mes y darse la gran vida comiendo día por medio y comprando ropa americana por kilo. Esa gentuza desactivada a la que usted aspira a guiar por la senda del éxito y el bienestar ilimitado. ¿Para qué, si a esos apelotardados les encanta la sopa para uno con pan añejo y tirar pinta en el Metro con los hombros regados de caspa? No pierda energía, Piñera, y siga dándonos razones para sentirnos orgullosos de ser chilenos. Examinando la célebre lista de ricos ricones globales nos encontramos, sin embargo, con una preocupante noticia: este año 2009 los billonarios han perdido, en promedio, un 23% de sus fortunas. Y de los 1.125 sujetos que decoraban este dorado, fragante y centellante mundo, ahora sólo quedan 793 con fortunas mayores a los mil millones de dólares. Una noticia que me tiene sin pegar pestaña. Sólo nos tranquiliza el ascenso vertiginoso, como de blanca paloma o jet de Lan, que ha tenido nuestro millonario ejemplar. Estamos de acuerdo con usted, Piñera: es estupendo este sistema de acumulación de riqueza. Es totalmente insuperable, porque pone las cosas en su lugar. A usted, por ejemplo, lo puso en el lugar 701 de la nómina del Club de los Billetes de Goma, mientras Eliodoro Matte entró al lote de las 100 primeras fortunas internacionales, saltando de la ubicación 117 en 2008, al puesto 81 este año. ¡Bravo también por don Eliodoro! En otro ranking, el de la inequidad, entre 173 países, Chile ocupa el puesto 42 de las naciones con peor distribución del ingreso, a la par de algunos cafres africanos y países de zarzuela. Pero qué importa si lo tenemos a usted, Piñera, en el ranking de los muchachos de 24 kilates. Desde estas líneas felicitamos a Piñera por su presea en salto largo, y vitoreamos su insaciable voluntad de acumular, contra viento y marea, para alegría de Chile y los chilenos. //LND

 

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