viernes, 30 de noviembre de 2007

Saludos a Juan Escobar.

Queridos Lumumberos !

                                         

                                         Goz챕 como chancho en el barro con los chascarros de Juan Escobar. Si bien no conozco a ninguno de los personajes en cuesti처n, la regi처n fue la morada de mis 첬ltimos meses en Chile antes de partir a la URSS. Me alegro que de repente dejemos las cosas serias para darle tiempo a la intimidad del alma de algunos de nuestros activos, que nos deleitan con sus destrezas creativas.  En una de esas puede ser un est챠mulo para Marcos Medalla, el Pato Ayala, Reinaldo (Samuel) Sandoval o nuestro amigo poeta Eusebio Painemal, para que nos entreguen tambi챕n  algunos de sus “secretos” que descansan en baúles o en los discos duros de sus ordenadores. En los Blogs de Marcos y Pato  de repente aparecen algunas huellas de su capacidad, pero estoy seguro que deben tener por ahí un par de cosas que serían de interés para los vastos lectores de nuestro Purgante. Sobre la política contingente seguiremos entregando nuestras opiniones y comentarios. Recién hoy aparecen las imágenes de lo que ha sido a lo mejor la mayor demostración ciudadana en la Republica hermana de Venezuela. Sigo la noticia de Venezuela dentro de los márgenes de la veracidad de la información que nos llega en los medios de masas, pero también escruto los pormenores informativos de los que allí viven en trabajan desde hace muchos años. Me preocupa que las relaciones internacionales entre los pueblos dependan a veces de un apelativo entre presidentes. Que se “revisen” las relaciones por que uno es “mentiroso” y el otro “incendiario”. Es, lamentablemente, el nivel a que hemos llegado cuando aparece un sujeto con plata que quiere bailar puro merecumbé, cuando en la sala hay también una buena cantidad de bailarines que les gustaría una cueca bien zapateada. No con ello quiero desacreditar el proceso de un país entero, pero me parece que estamos llegando a las postrimerías de la tolerancia cuando un “saco de trolas” quiere adueñarse de la discusión. “El que no está de acuerdo conmigo, es un lacayo del imperialismo” , no creo que sea el camino correcto ni el aceptable.  El domingo es un d챠a importante para el mundo democr찼tico. En Venezuela un refer챕ndum y en Rusia una elecci처n que se ha transformado, por decisi처n de su super-estructura pol챠tica,  también en un referéndum. A ambos procesos les daremos en nuestro Purgante con tuti, cuando sea necesario y menester. Lo más terrible del caso de Rusia, que casi un pueblo entero está por la alternativa que le puso el pelao Putin : O yo o el caos ¡. Todo esto afianzado por la omnipotencia de la prensa entera a su favor. Personalmente creo que el pelao Putin, con todos los altibajos del mundo, ha logrado sacar al país del caos en que lo dejaran los “demócratas” Gorvachov y Jelzin, pero en ningun caso ha disminuido el saqueo del pueblo Ruso por parte de los oligarcas, con los cuales el pelao se ha congratulado. Los avances en la revolución Venezolana pueden ser considerables, pero  la división ciudadana ha llegado a límites extremos donde puede colapsar. Por otra parte, sin el billete de los hidrocarburos, difícilmente el país habría podido contrapesar los desequilibrios ni el despliegue financiero en tópicos ajenos a la realidad de ese país. Me refiero a Venezuela, aunque lo mimo podría decirse de la Federación Rusa. Respeto, sin embargo, el esfuerzo en cambiar las estructuras de poder y de despilfarro de otros tiempos. No así el comportamiento el presidente con respecto a otras voluntades y decisiones de naciones hermanas soberanas. Aquí no me refiero a los excesos vividos en Santiago de Chile con respecto a José Maria Aznar ni al “pelota de carey” de  Juan Carlos de Borb처n.  Ninguno de los personajes merece ni mi respeto ni mucho menos mi admiración. Más bien me refiero a el lugar de la “cumbre” y al respeto irrestricto que merecían sus anfitriones. Un compañero anónimo para el resto del Purgante me decía en el correo privado que no me olvidara de los crímenes que ocurrieron en la Unión Soviética durante el socialismo real. En ningún caso, mi querido amigo. Cuando digo que el bienestar del ex pueblo soviético era superior a la miseria de hoy, me refiero a las relaciones económicas y sociales de los años en que tuve la suerte de vivir y estudiar en la URSS. En una de esas tienes razón que hoy se vive con mayor libertad, pero es una libertad relativa como casi todas las libertades del mundo. Las restricciones de hoy son diferentes. Hoy manda el billete y el que no lo tiene, cagaste te mandó saludos. No tienes ni libertad, ni las estructuras institucionales te entregan la justicia, cuando la exiges. Pero al mal tiempo, buena cara, mis queridos amigos de la Lumumba. Un fuerte abrazo a todos, con la fraternidad de costumbre.

Ren챕

Alemania, 30.11.2007.-

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