domingo, 17 de abril de 2005

A robar , a robar, que Canada se puede acabar.

Corrupcion politica canadiense.

En numerosas ocasiones hemos rasgado vestiduras para referirnos a la corrupcion politica y economica de nuestros paises de origen. Sin dar ejemplos concretos y solo basandonos en casos generales y nuestra acostumbrada oposicion a los gobiernos de nuestras patrias latinoamericanas, empleamos un idioma severo y lleno de juicios pre-establecidos para referirnos a la supuestamente endemica "corrupcion latinoamericana". Mientras esto hacemos, vivimos, por razones de exilio politico, economico, o por simples razones personales y familiares, en paises "desarrollados" donde trabajamos, pagamos impuestos, criamos y educamos los hijos, gastamos y mal-gastamos nuestras fuerzas postreras en estos paises que se quedan con el fruto del trabajo sacrificado de nuestras vidas, mientras continuamos despotricando contra nuestros paises de origen y callamos como corderos previamente degollados ante la putrida situacion interna de nuestras patrias "desarrolladas".

Debo confesar que esta actitud nuestra me parece muy subdesarrollada. No me refiero con ello solo a los latinoamericanos sino practicamente a toda la emigracion, sin la cual estos paises no podrian funcionar como tales. En ocasiones he mencionado el caso de Canada, donde vivo hace tantos a챰os y aunque a muchos de los lectores les importe un bledo la situacion canadiense, yo insisto en referirme a ella porque refleja con mucho el estado nauseabundo de la corrupcion y de la etica para referirse a los temas mundiales en general y latinoamericanos en particular.

Canada arrastra hace decenios con una gran piedra en el zapato: la provincia de Quebec. Provincia de habla francesa, con ansias de nacion independiente, conciencia de diversidad etnica y cultural, Quebec ha sido el tema molesto de Canada, es la salida al mar boliviano que tiene Canada y que le impide a toda hora poder disfrutar a sus anchas de la completa soberania sobre todo su territorio y su poblacion. Quebec ha capitalizado esa situacion al maximo, ha logrado legislacion privilegiada en muchos aspectos, subsidios, regalias inconfesables de ni챰o mimado y junto con ello se ha ganado el rechazo y al menos la antipatia de muchos en las provincias de lengua inglesa. Durante el gobierno de Pierre Trudeau hubo un plesbiscito en Quebec para decidir la separacion. Entonces la campa챰a fue a todo fuego, con Trudeau y Levesque, el lider de Quebec dandose con todo. El resultado final fue un amplio y rotundo triunfo para el NO federalista y Quebec tuvo que olvidarse de la separacion, al menos por unas decadas. Hace como 6 a챰os hubo otro plesbiscito, ahora con Jean Chretien como Primer Ministro y otra vez la campa챰a fue ardua. Las encuestas daban un virtual empate e incluso el triunfo de la posicion separatista de Quebec. Chretien habia sido el brazo derecho de Trudeau en el anterior referendum y uso toda su experiencia para mantener a Canada unida.

Una de sus artima챰as fue aprobar un programa de Auspicios del Gobierno Federal. Se trataba de promover acciones culturales, deportivas, artisticas, publicaciones, actos masivos, ornato ciudadano, banderitas, insignias, florcitas multicolores y todo cuanto las mentes promotoras pudieran imaginar para ayudar al electorado de Quebec a votar por el No y seguir disfrutando de la patria canadiense. Para llevar a efecto este Programa de Auspicios (Sponsorship programm) aprobaron una bagatela de unos 600 millones de dolares de presupuesto. Para los cofres federales, esta cantidad era un coco de mono, nada, platas menores. Y la causa era mas que justificada, mantener el pais unido, nadie podia discutir nada. De hecho, el No triunfo otra vez , ahora por un margen minimo del uno o dos por ciento, pero triunfo al fin y Canada sigue unido.

Hasta ahi todo perfecto. Ya nadie se acordaba del famoso programita hasta que una fiscal federal de cuentas, ante unas vagas denuncias, comenzo a escarbar los archivos federales del famoso programita y Zuacate!: La cosa era mas hedionda que pescado del mes pasado y coincidentalmente, Chretien se despedia de la politica y daba la pasada al nuevo Liberal lider del pais, Paul Martin. Este ultimo, que habia sido ministro de finanzas de Chretien, puso cara de sorpresa, se hizo el que nada sabia y ordeno de inmediato una investigacion federal y nombro un juez de alto prestigio para llevar adelante la investigacion.

De eso han pasado unos meses y durante ellos, el pais completo ha sido testigo atonito, incredulo, del desfile de testigos y la declaracion de los responsables del hediondo programa, desde el mismo Chretien, el ex ministro de obras publicas, el mafioso Gagliano, jefes de servicios, jefes de gabinetes, miembros connotados del partido Liberal, industriales, due챰os de empresas de publicidad, lobbistas, como llaman ahora a los que tienen cu챰as en alto nivel y las venden para lograr contratos e influencia politica. Todos han salido al baile y la cosa es tan increible como esta:

El famoso programa fue una gastadera de plata por servicios que jamas se otorgaron, las empresas facturaban, cobraban y no hacian nada, no editaban las encoclopedias, ni izaban las banderas, ni imprimian los afiches, nada, y si lo hacian, quemaban los libros para evitar el gasto de repartirlos o facturaban dos o tres veces por lo mismo y por cantidades que cualquiera se hacia rico de un paraguazo sin el menor esfuerzo. Hay un amigo personal de Chretien que se embolsico una cantidad abultada de millones de dolares por servicios en mas de OCHO Estadios Olimpicos en la Provincia de Quebec y resulta que existe UN solo estadio Olimpico en Montreal. Aparecen inventados en varias ciudades Estadios Olimpicos pagando servicios de fantasia pero con millones reales al bolsillo de estos delincuentes.

Ahora los ultimos testigos han declarado que muchos de los fondos iban derecho para la "causa" del partido liberal. Otros testigos, renombrados politicos canadienses principalmente de Quebec, han sido afectados de una verdadera epidemia de mala memoria. Se han olvidado porque almorzaron o cenaron con Chretien tal o cual dia, aunque los records indican que discutieron la repartija del programa. Hay uno que hasta se olvido porque alojo un dia en la casa del Primer Ministro.

Esto no ha terminado, hay decenas de testigos aun por declarar, muchos mas escandalos que descubrir y mientras tanto las encuestas indican que el gobierno de Martin esta en el abismo y con peligro de ser reemplazado por los conservadores que son otros que robaron pero antes y siempre.

Amigos, yo les cuento todo esto porque me da una calentura inmensa cuando escucho a estos dinosaurios ladrones, corruptos, rateros de la politica, cuando inflan el pecho y se permiten criticar y menoscabar a nuestros paises latinoamericanos, hablan de corrupcion, de fraudes, de la democracia "representativa", hacen gargaras con el mundo libre y segun mi opinion, los fraudes y corrupcion de nuestros paises muchas veces son una alpargata al lado de los escandalos del mundo "desarrollado". Poco antes de entregar el mando, Chretien anduvo en Africa, dando clases magistrales de democracia, ense챰ando y amenzando a esos paises con suspender programas famelicos de ayuda si no tomaban en cuenta sus indicaciones sobre elecciones internas. Que cara de palo tenia Chretien de ir a Africa a hablar de corrupcion electoral, si en su casa sus amigos se llenaban los bolsillos mas desvergonzadamente que asaltando un banco. Al menos los asaltantes de un banco arriesgan el pellejo; estos jamas arriesgaron nada, robaron con proteccion.

Y todavia faltan otros programas. Tal como me decia un querido lumumbero canadiense, esta es la punta del iceberg. Falta saber quien recibio los mil millones de dolares que costaron cuatro submarinos ingleses viejos, oxidados e incapaces de navegar y sumergirse que Canada compro a Inglaterra. Quizas con esa plata la Camila se compro las plumas del sombrero de bodas.

Mr. Tony Blair, por favor digale a su electorado, porque le vendio cuatro chatarras a Canada en mil millones de dolares si no podian navegar y un tripulante canadiense murio cuando lo intentaron.

Voy a traducir esta ultima frase y se la enviare a Blair a un diario ingles. Seremos de segunda, de tercera o de cuarta clase los inmigrantes pero nos asiste el mismo derecho de indignarnos con esta corrupcion, esta verguenza publica.

Yo comprendo que nuestras mentes estan en la patria lejana, en el idioma natal y en la politica chilena, argentina, boliviana, venezolana. Pero eso no significa que debamos solo criticar y desprestigiar a nuestras patrias de origen, mientras aceptamos a pie juntillas y callado el loro, cuanta cochinada sucede en nuestras patrias "desarrolladas". En Chile estamos familiarizados con eso de que "veras como quieren en Chile, al amigo cuando es forastero". Aqui en Canada, los forasteros sirven para construir el pais, como la via ferrea que fue vital para su desarrollo, construida enteramente por chinos que fueron esclavos, sin derechos, sin familias, pagando un "impuesto por cabeza". Tambien los forasteros son los trabajadores de la constuccion, de las industrias, del transporte, de los servicios. En esta provincia de Ontario, tendrian que importar hasta los tomates si no trajeran trabajadores mejicanos a cosecharlos, los que llegan escoltados, llevados a los campos en calidad de esclavos con otro nombre, sin derecho a mezclarse con la poblacion y una vez los tomates en el cajon, de vuelta a Mejico con los dolares que son la tercera o quinta parte del salario minimo en Canada. "Que culpa tiene el tomate...?"

Y con esa cara van despues los gringos a hablar de derechos campesinos a nuestras patrias. Hasta las ni챰eras filipinas, las stiptiseras de Rusia y Rumania, llegan a Canada bajo regimenes especiales de "trabajadoras temporales". Una vez explotadas, manoseadas en clubes privados y tenidas bajo encierro, retornan a sus patrias sin haber podido disfrutar del "mundo libre".

Yo mismo he dicho en otros temas: No todo lo que brilla es oro. Para lograr respeto y derechos de ciudadano en este pais, cuesta a챰os de esfuerzo, trabajo, sacrificio. En el camino, hemos entregado a este pais lo mejor que teniamos: nuestros hijos. Por ellos y para que ellos vivan en una patria menos hipocrita y menos corrupta es que debemos abrir la boca para denunciar lo que pasa aqui. Esta bien informarse de nuestras patrias natales, alla estan las raices y quizas el corazon, pero no callar ante estos badulaques canadienses que se han robado hasta la plata de las colectas.

Putas que nos enojamos e indignamos, con razon, de los millones que Pinochet acarreo al extranjero en sus 18 a챰os de dictadura sangrienta.

Estos politicos canadienses, se echaron al bolsillo muchos mas millones, sin dictadura, pasando la factura y, al igual que Pinochet, se "olvidaron" de los detalles.

Los ladrones, en Rusia, Canada , Chile o Chuchunco, son todos los mismos.

( Si me deportan, nos vemos en Chile).

Marcos Medalla

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