"La culebra esta viva, pero acorralada"

Uribe: "La culebra" est찼 viva, pero acorralada.

 ''Cansado y envejecido, así se veía Manuel Marulanda, alias Tirofijo, comandante en jefe de las Farc, hace cinco años durante el tiempo en que existió la zona de despeje en El Caguán. Mucho se ha especulado con su supuesta muerte, que hasta ahora nadie a comprobado. ''

 Tal como est찼n las cosas, la guerrilla m찼s vieja del mundo se va a acabar m찼s temprano que tarde. Aunque esta afirmaci처n puede generar pol챕mica, el declive del grupo subversivo, cuyo norte pol챠tico extravi처 hace tiempo, comienza a ser cada vez m찼s palpable hasta para el m찼s incr챕dulo de los colombianos, seg첬n expertos en el tema.

 ''A la cabeza de esa nueva dinámica del conflicto se encuentra el presidente Álvaro Uribe, quien fue elegido en el 2002 y reelegido en 2006 gracias a su promesa de derrotar militarmente a la guerrilla, objetivo que aún no se cumple, pero que cada vez parece más cercano.''

Las Farc hoy se ven desgastadas despu챕s de un quinquenio en el que se han mantenido en retirada y donde jam찼s han podido recuperar la iniciativa que alcanzaron en 1998, cuando dieron certeros golpes que obligaron al Gobierno a pactar una zona de despeje para dialogar.

Ganando la guerra

Los golpes propinados por las Fuerzas Armadas durante el 2007 contra varios mandos medios de las Farc han logrado lastimar el coraz처n de la guerrilla.

 ''Gracias a la mezcla de inteligencia y operaciones de tipo comando, grupos pequeños y altamente entrenados, las tropas llegaron por primera vez a campamentos de guerrilleros importantes a los que se consideraba intocables.''

 Tal es el caso del ''Negro Acacio'', Mart챠n Caballero y Milton Sierra, alias JJ, quienes fueron dados de baja. Los tres eran piezas claves en el control de territorios para la insurgencia, ten챠an capacidad de recolectar finanzas, se desenvolv챠an muy bien en el aspecto militar y ten챠an discurso pol챠tico. Eran coroneles en ascenso. Otro golpe importante, aunque inconcluso, fue la operaci처n contra Carlos Antonio Lozada, el comandante ''Jorge 40'' guerrillero encargado de reactivar las milicias urbanas en Bogot찼. Lozada escap처 gravemente herido, pero tras su huida dej처 el computador y varios documentos con informaci처n valiosa.

Valor civil

 A las exitosas acciones militares hay que sumar el positivo impacto que caus처 la fuga de varios secuestrados en poder de las Farc. Entre los casos m찼s sonados est찼n el de Fernando Ara첬jo y John Frank Pinchao, quienes con sus actos de hero챠smo ayudaron para que la percepci처n de que la guerrilla no es invencible siga aumentando.

Julio fue el mes en que las Farc se vieron m찼s arrinconadas y no propiamente por operaciones militares, sino por el clamor de una sociedad cansada de su barbarie. La que demostraron una vez m찼s al asesinar a los once diputados del Valle, lo que llev처 a este grupo subversivo a su nivel m찼s bajo de popularidad.

 Frente al magnicidio Colombia entera se volc처 a las calles y march처 en contra del horror, enviando un claro mensaje al mundo de repudio a las Farc. Incluso desde la izquierda, muchas veces cuestionada por su postura pasiva ante 'la combinaci처n de las formas de lucha' utilizadas por la guerrilla, las cr챠ticas fueron contundentes. Gustavo Petro se챰al처 en una plenaria del Senado que, “a las Farc las está asfixiando la democracia”.

Medidas desesperadas

Ante los reveses pol챠ticos y militares que han sufrido las Farc durante el 2007, el grupo subversivo se est찼 jugando la que podr챠a ser su 첬ltima carta: presionar al Gobierno con los secuestrados pol챠ticos.

 Con esto lograron un respiro de tres meses y que su nombre volviera a sonar internacionalmente, gracias a la discutida mediación del presidente Hugo Chávez de Venezuela, así como de la senadora colombiana Piedad Córdoba.

 Situación que se salió de control para el Gobierno, por lo que el presidente Uribe terminó la misión humanitaria, argumentando falta de pruebas que demostrarán un avance concreto.

Entonces vino algo incre챠ble, las Farc anunciaron la liberaci처n de Clara Rojas, su hijo nacido en cautiverio y Consuelo Perdomo. Ese anuncio les sirvi처 para mantener en vilo a todo el pa챠s, durante la semana final del a챰o.

Las Farc est찼n debilitadas pero todav챠a pueden causar da챰o. Y Cali lo comprob처 el pasado 9 de abril cuando un carrobomba colocado por milicianos vol처 el comando de la Polic챠a. “La culebra aún esta viva”, como advierte el propio presidente Uribe. Viva, pero cada vez m찼s herida y acorralada

"Revisamos las denuncias sobre ejecuciones extrajudiciales, porque esta ser찼 la primera guerra que se gane respetando los derechos humanos". General Alejandro Navas, Comandante Fuerza de Tarea Omega.

 Por Fabio Posada

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Seg첬n Human Rights Watch: “las Farc tienen a la mayoría de los niños combatientes de Colombia. Partiendo de una estimación conservadora, entre el 20 y el 30 por ciento de los combatientes de las Farc son menores de 18 años”.