Vacaciones europeas a los fiscales militares y navales de Chile.

La intrincada historia del ex fiscal militar Podlech
Por Jorge Escalante / La Naci처n

El día del golpe, García Díaz vio entrar a Podlech vestido de militar a la cárcel para rescatar a diez prisioneros del movimiento de extrema derecha Patria y Libertad. “El señor Podlech traía una orden de la fiscalía”, dijo García en 2004.
FOTOFIJA_ART200


El ex fiscal militar Alfonso Podlech cometi처 el error de mirar a Europa habiendo sido puntal represivo de la dictadura de Augusto Pinochet, sin recordar que existi처 un Hitler y el holocausto. Lo que para el viejo continente es inolvidable.

Podlech tambi챕n olvid처 los numerosos testimonios de ex prisioneros y funcionarios de Gendarmer챠a que en Chile pesan en su contra como ex fiscal.

Adem찼s, 챕l mismo reconoci처 judicialmente su encuentro con el jefe de la Caravana de la Muerte, general Sergio Arellano, cuando el "Lobo" y su gente aparecieron por Temuco en octubre de 1973 para asesinar prisioneros y comprometer en ello a oficiales locales de regimientos como el Tucapel.

Alfredo Garc챠a D챠az, ex jefe de la guardia interna de la C찼rcel de Temuco, acus처 a Podlech en una declaraci처n judicial: "los detenidos eran sacados de la Penitenciar챠a de Temuco y no volv챠an. Despu챕s por los bandos se sab챠a que los hab챠an matado por ley de fuga y se les borraba del libro de ingreso. Esas 처rdenes las daban los fiscales militares como el se챰or Podlech".

El d챠a del golpe, Garc챠a D챠az vio entrar a Podlech vestido de militar a la c찼rcel para rescatar a diez prisioneros del movimiento de extrema derecha Patria y Libertad. "El se챰or Podlech tra챠a una orden de la fiscal챠a", dijo Garc챠a judicialmente en mayo de 2004.

El ex prisionero V챠ctor Maturana Burgos es m찼s categ처rico. Procesalmente sostuvo que Podlech amenazaba a los detenidos con que si no "cooperaban" sufrir챠an las consecuencias en el Regimiento Tucapel, donde estaba la oficina de la fiscal챠a.

"Esto refleja que el señor Podlech sabía que éramos torturados. Y cuando no quedaba conforme con lo que declarábamos, nos mandaba con gente del Servicio de Inteligencia para que nos ‘trabajaran un poco más’". Maturana fue careado con Podlech en abril de 2002. El ex fiscal negó las acusaciones, pero reconoció que la fiscalía actuaba estrechamente con el Regimiento Tucapel.

Pero el Regimiento Tucapel con Podlech presente tiene otra historia. La noche del 2 de octubre de 1973 all챠 fueron asesinados los prisioneros Jos챕 Ortigosa, Daniel Mateluna, Pedro R챠os y el GAP Guido Troncoso. Fue la misma noche en que Podlech reconoce que recibi처 al "Lobo" Arellano que lleg처 en el helic처ptero Puma al patio del regimiento.

"Me encontraba en la ayudant챠a, el general Arellano se acerc처 y nos saludamos. Nos habl처 de los consejos de guerra y que nadie pod챠a ser juzgado por actos cometidos antes del 11 de septiembre seg첬n la irretroactividad de la ley (por estado de guerra)".

Fue lo mismo que Arellano dijo en cada ciudad como supuestamente Pinochet se lo hab챠a encomendado: "Velar por procesos justos para los detenidos".

No obstante, el jefe de Estado Mayor del "Lobo" durante la caravana, el teniente coronel Sergio Arredondo, se lo enrostr처 a Arellano en un careo ante el juez Juan Guzm찼n: "Para qu챕 seguimos con lo mismo, si todos sab챠amos que la misi처n era matar prisioneros", le dijo a quien fue su jefe.

La caravana pernoct처 esa noche en el Tucapel y estuvo yendo y viniendo entre Temuco, Valdivia y Victoria hasta el 6 de octubre de 1973. Precisamente en esos d챠as desapareci처 desde el Tucapel o desde la c찼rcel, el ex sacerdote Omar Venturelli (4 de octubre), Dixon Retamal Cornejo y Rub챕n Morales Jara.

Hay decenas de ex prisioneros que le formulan otras imputaciones similares a Podlech en los distintos procesos que se instruyen en Temuco y Santiago, en los que hasta ahora no se le ha procesado, seg첬n abogados querellantes, por el poder que Podlech tiene todav챠a, sobre todo en Temuco.