Queridos Lumumberos !
Lindo encuentro en ValparaÃso queridos amigos. Me imagino las emociones que está viviendo nuestro amigo y compañero Marcos Medalla. Cosa extraña. Leyendo vuestros mensajes, recordé que el Pato es oriundo de Quillota. Por alguna razón, cuando nombran a Quillota, me lo imagino de color amarillo. Debe ser por el color de la camiseta del club San Luis de Quillota de tiempos remotos. Nunca he estado en esas tierras, pero no pierdo la esperanza de hacerlo cuando vuelva. A Marcos solo quiero recordarle que mantenga esas "amistaditas" en la Aduana y que las alimente. A veces las autoridads aduaneras se ponen más duras que una pata cruda, cuando se trata de internar algun "cachureo", despues de tantos años de ausencia. Le pasó a Jorge Vasquez, alias "Pichula". Llevó su autito, cumplió con los requerimientos, pero en la aduana le dijeron que le faltaban unos meses para los dos años de ausencia necesarios para la internación. Casi se fué de culo. Le faltaban dos meses !!. Tuvo que comprobar que eran 30 años los reales para solucionar el problema. No lo he conversado todavÃa con Pichu o con Julián, para enterarme del detalle, que al parecer le echó una manito, o su esposa la Toñita. Lo cierto y recomendable, que antes de dejarse caer por la patria, se den una vuelta por algun consulado para considerar lo que es permitido y lo que no és en la realidad chilensis. Antes de llenar el contenedor, les aconsejo que el consulado les entregue por escrito las reglas del juego. A veces sale más a cuenta equiparse en Chile que acarrear los cachivaches desde europa o américa del norte. Segun mis planes, no tendré dificultades. Quiero vivir en Chile solo las primaveras y los veranos. Los inviernos de Chile aún los mantengo en la memória de la médula de mis huesos. Recuerdo que cuando niño, caminaba un par de Km a la escuela rural de San Ignacio, saltando en los charcos congelados y con las manos y la cara como camarón cocido del frio . Para más remate, despues de entonar el himno nacional al pie de la bandera, un inspector del colegio revisaba el estado de las manos y de la uñas. con un enorme llavero colgado de una cadena de plata Peruana, segun decÃa. Quien no tenÃa las manos como se las imaginaba el curaguilla, recibÃa un "llaverazo" en los dedos semi congelados. Antes de marcharse de la escuela, al terminar el último (sexto) curso de primaria, un grupo de escolares campesinos arrastró al inspector a los servicios higénicos. No le dejaron ni un diente y como membrillo de colegial. Nadie vió ni escuchó nada. Hasta los colegas le tenÃan mala por lo sádico. Pero todo al margen, mis queridos amigos. No siempre, y en esto tienen razón Marcos y el Pato, deben ser temas demasiado serios en nuestro Purgante. Los chascarros de las experiencias de los compañeros podrÃan bien adornar tambien nuestra página. Ojalá pueda contarnos más tarde Marcos un poco su paso por la patria. Un fuerte abrazo a todos, con la fraternidad de siempre.
Ren챕
Alemania, 05.04.2007.-
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