El código de da Vince.

Queridos Lumumberos !                                              Con el estreno de la película "Sacrilegio" o "Código de Da Vince", se dá inicio en europa a una controversia de enormes proporciones. Junto al integrismo Islámico, aparece en primer plano el integrismo de la iglesia católica, personificado en el siniestro grupo de "personalidades" del Opus Dei (Obra de Dios) de Joaquin Escrivá de Balaguer. Si bien la iglesia explicó, una vez que se agotaron los intentos por parar la película, que los fieles tendrían autorización de verla , siempre y cuando visitaran los cines con el ánimo de ver cine de aventura y una "salsa" de suposiciones y especulaciones sin asidero. Fué como echarle bencina al fuego. En mi ciudad, 14 cines inaguraban la semana con el Código de  Da Vince, pero no fué posible conseguir un boleto. La crítica del cine en los tabloides europeos de mayor renombre, hablan de una obra de escasa calidad, en lo que respecta a los actores, pero la temática sería de gran explosividad. La mayoría de los visitantes han sido jovenes, quienes se volcaron a las librerías para adquirir el libro. Alguna gente mayor ha desistido de ver la película, pero segun una encuesta de la TV Alemana, los hijos y nietos no encontraron nada mejor que regalarles un ejemplar del libro para que participen de la discusión, sin tener que visitar los cines. El intento de las iglesias cristianas ( sobre todo de la católica) por disminuír la relevancia del tema, se ha traducido en un veradero tiro por la culata. Los monjes y curas con carteles en la principal via peatonal de Colonia, tratando de advertir los peligros de la blasfemia, fueron auyentados por Punks con huevos podridos y tomates. La policia no intervino, curiosamente.  Solo las monjas se escaparon de la batida, que llamaban a no visitar los cines desde un bus con altoparlantes. Sin haber visto aún la película, comparo la discusión civil solo con el tumulto que provocó el film "Holocausto",  que mostraba los horrores del exterminio en los campos de concentración fascistas. Personalmente creo que la iglesia misma ha sido culpable del revuelo, por mantener dogmas irrisorios en sociedades acostumbradas a vivir de realidades palpables.  Grupos integristas Islámicos, por dárselas de simpáticos y de ganar confianza en Alemania, salieron igualmente con mesas de informacion sobre la necesidad de una fé sólida en Dios.  Fueron desalojados por la policía, por no disponer de los permisos correspondientes. Estoy claro que el libro de Dan Brown no es la Biblia de lo que fué, pero recoge las dudas potenciadas de una ciudadanía diferente a la de la edad media. Al decir de Eusebio Painemal, son muy pocos los que comulgan a estas alturas del partido con ruedas de carreta. Un abrazo a todos, con la fraternidad de siempre. Ren챕 Alemania, 19.05.2006.-