miércoles, 31 de mayo de 2006

Paro nacional de estudiantes

Represi처n a los estudiantes en paro.

Perros en la calle

Los soltaron. Vieron muchos brazos al aire, piernas 찼giles, voces disonantes. Obedecieron al instinto y atacaron. No conocen aquello de fuerza disuasiva, equilibrada. Tampoco aquello de controlar, canalizar, controlar. Solo saben de fuerza, toda la fuerza. Tambi챕n de barrer, aplastar, sacar del camino. Lo hicieron. Mordieron, aplastaron cabezas, costillas, torcieron brazos, arrastraron por el pelo a estudiantes y periodistas. Dejaron dolor e interrogantes. La m찼quina del tiempo en reversa.

Estamos en otros tiempos, dicen. Pero, 쩔c처mo los entrenan, qu챕 les meten en los m첬sculos, los bototos, las lumas? Sobre todo, 쩔qu챕 les meten a첬n en la cabeza? 쩔Todav챠a les dicen que el honor y la disciplina tienen uniforme? 쩔Que ellos representan los valores inmutables de la patria? 쩔Que la ropa civil oculta desorden, incultura patria, flojera, relativismo moral? 쩔Todav챠a creen que el ciudadano que marcha y vocifera en la calle tiene una L en la frente? Pero la democracia es bullicio, interpelaci처n a la autoridad, cuestionar la cuesti처n, derecho a petici처n. El silencio absoluto est찼 en los cementerios. El silencio relativo, hip처crita, en los regimientos.

Por lo menos, el subsecretario del Interior y el Jefe de la zona metropolitana de carabineros han dejado vislumbrar la sospecha del uso de la fuerza excesiva en este d챠a de paro nacional. Que hay motivo para investigaciones internas. Y el ministro de educaci처n ocup처 su silla frente a los j처venes.

Gracias a los estudiantes, que han puesto en la agenda cosas fundamentales sobre la calidad de la educaci처n, la solidaridad, la equidad. Temas obviados, porque tienen la l처gica del mercado: replantearselos requiere de dinero, mucho dinero. Pero sobre todo, de pantalones democr찼ticos (voluntad pol챠tica que la llaman, aunque demasiado a menudo tiene demasiado c찼lculo y poca decisi처n) . A falta de 챕stos en per챠odos anteriores, tenemos hoy la esperanza en las polleras consecuentes y con sentido de la urgencia. Hasta ayer ten챠a sentido hablar en este tema de procesos. Hoy, el tiempo pol챠tico est찼 agonizando. A menos que se espere la muerte de vidas a첬n tan breves.

El di찼logo fruct챠fero, antes de las l찼grimas, Michelle.

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