martes, 22 de agosto de 2006

Soy de la Habana !.

Queridos Lumumberos !
                                             Esperé a mi amigo Cubano y a su esposa en el aeropuerto de Colonia, charlando con la mujer del kiosco de diarios. El avión llegó procedente de Madrid con algo de atraso y en el terminal falso. La razón fueron los controles adicionales en España, despues del cuento de los atentados detectados y desarticulados de Londres, pero que en la capital del Reino Unido forman parte del pasado y de una parodia macabra. Peter Bryan, un colega Australiano, pero que reside en Londres, contaba a todo cuello que los británicos piensan que se trata de un zafarrancho premeditado para medir el grado de alerta y sensibilidad de la gente. Pero no es lo central de este mensaje. La amistad de muchos años con Leandro e Isidora (nombres cambiados) y la posibilidad de recibir una información sin tabúes de la situación política de Cuba, me hicieron sentir el atraso de la nave con creces. "Cuba es un colmenar chico", dijo Isidora al oido, adelantándose al detalle en la privacidad de nuestra casa. "Todo el mundo quiere enterarse solo de una cosa : "como es eso de salir a la calle a conseguir un empleo". "Y como resulta eso de tener un empleo y pagar la mitad del ingreso en un alquiler". En otras palabras, dijo Leandro, - " la gente se prepara para el caso que pase algo importante
en nuestro pais y, con esa postura, lo m찼s probable es que pase"-. Conversamos hasta las 4.30 de la madrugada sobre los m찼s diversos temas, llegando a la conclusi처n de que nuestros amigos solo conoc챠an una parte de las noticias que se ventilan en el mundo, pero si tra챠an el pulso real del acontecer Cubano actual. La gente respeta a Ra첬l Castro porque es el 첬nico que est찼 en capacidad de contradecirle algo al m찼ximo lider, pero sin Fidel, esa particularidad practicamente lo reduce a cero. No es el estadista, no es la personalidad que pueda dirigir los destinos de un pais tan codiciado por el imperialismo Yanke.  Nadie en el mundo ha sido tan irreverente con las administraciones yankes, sin que por ello haya tenido que sufrir los bombazos del imperio, agregaba Isidora. -"pero nuestra revolución ha prosperado, pero muy por debajo de la prosperidad de otras naciones similares sin revolución". - No podemos ser todos Raúl Castro para que lleguen las propuesta de las correcturas a oidos de un hombre que lo resulve todo. "Por lo menos las correcturas que se tranzan en las calles de Cuba y que son Voix Populi, pero que ignora la cúpula administrativa". Con más éxitos que hubiese obtenido la revolución Cubana, más revolucionarios tendría, me permito agregar. Exáctamente !, responden al unísono. El convencimiento de que una revolución triunfa, llega con el bienestar de su pueblo. Pero en Cuba todo esto se suple por una muy bien coordinada propaganda. Nosotros somo privilegiados, agregan. Sin nuestro rol de científicos invitados por España cada año por tres meses, pesaríamos cada uno de nosotros diez libras menos. Nosotros somos revolucionarios, mientras que la mayoría del resto de los Cubanos son Fidelistas. Que pasará con los Fidelistas sin Fidel ?, pregunto con inosencia. Lo mismo que en Argentina con los Peronistas, responde Leandro. Mientra viva el mito, vivirá el Fidelismo. El único peligro, si se puede llamar así, es que la propaganda contraria lo disminuya. O simplemente que lo deje para las comparaciones. Lo utilizó la junta fascista chilena con éxito: durante muchos años se manejaron los videos de las huelgas y de las colas de suministros para recordarle a la gente los peligros de una vuelta al juego democrático. En Cuba la comparación se daría entre el consumo capitalista y el déficit socialista Cubano. Ni hablar de la información. Una de las mayores críticas del pueblo soviético contra sus dirigentes, dijo Isidora, que estudió un año en la U.R.S.S., fué el haber llegado a un nivel cultural tal, que no podían imaginarse que los estubieran engañando. Sucede en Cuba, pero en forma diferente. Rusia no es una isla y el caribe no es europa. La revolución Cubana habría que repensarla, fueron sus últimas palabras. -"De tener el dinero de Venezuela, la revolución triunfaría en todo el caribe, a lo mejor, en toda latino américa". Acordamos el dia siguente visitar un restaurant Portugués ( Lucitania ). Es muy discreto y podríamos hablar sobre el dinero Venezolano, pero tambien sobre el concepto de libertad. Me quedó la impresión que nuestros amigos Cubanos entienden las libertads democráticas en forma algo distinta a como nosotros las entendemos. Quedamos en que sería el tema, acompañados del Viño Verde Portugués y de los manjares de pescados de los cocineros Lucitanos. Un fuerte abrazo a todos, con la fraternidad de siempre.
Ren쨈we
Alemania, 22.08.2006.-  

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