El box Cubano no estarüa en Chicago.

Queridos Lumumberos !

                                          El deporte amateur en Cuba es reconocido en todo el mundo como ejemplar y de gran calidad. Sobre todo se destacan los boxeadores de la isla, que recibieron 5 medallas de oro en los juegos olímpicos de Atenas en el 2004. Pero fue Fidel Castro en persona que decidió de una plumada que el equipo Cubano no tomara parte en el campeonato del mundo del box amateur, que se inaugura hoy en la ciudad norteamericana de Chicago. Los promotores de los países capitalistas, según Fidel, esperaban con ansias esta fecha, para embolsicarse el esfuerzo de la federación de boxeo Cubano y llevarse a los mejores del equipo a sus clubes profesionales. Si lo dice Fidel, alguna razón tendrá. Recién a finales de Julio recién pasado, en los juegos panamericanos de Rio de Janeiro, el doble campeón olímpico Guillermo Rigandeaux y el actual campeón mundial de los amateur del peso Walter Erislandy Lara, se echaron el pollo alejándose del equipo y de los “funcionarios” que los acompañaban. En Diciembre del 2006 ya lo habían echo los tres medallas de oro (de 5) de los juegos de Atenas, Yan Barthelemy, Yuriorkis Gamboa y Odlanier Solis se mandaron a cambiar igualmente del equipo, aprovechando un descuido de los sabuesos de la delegación. Los nombres de los atletas son más raros que perro verde. Pero no tiene importancia para el caso ni para este modesto mensaje. Que pasa entonces en la isla ??. Siempre fue un orgullo defender la camiseta de la revolución cubana. Recordaremos los triunfos de Teófilo Stevenson o de Juantorena, que nos llevó a todos sentirnos orgullosos de los triunfos latinos. Muy escasos, por lo demás. Pero creo que algunas cosas cansan. Estos formidables atletas reconocen la calidad de la escuela Cubana de atletismo, pero no están dispuestos a seguir pasando junto a sus familias las pellejerías que conoce todo el mundo, menos los administradores de la isla, naturalmente. Hay muchos que no ven futuro alguno en la isla. Lo explicaba un entrenador Cubano residente en Madrid, que se echó el broiler hace ya muchos años. Los problemas de abastecimiento son tan graves y humillantes, que el amor a la patria socialista se diluye paulatinamente incluso a la hora de recibir las medallas. A pesar de reconocer el esfuerzo del estado en esta materia, el hombre dijo que la falta de viviendas dignas, las libretas de suministros cada vez disminuidas, la creciente presión policial y el chantage familiar para asegurar los retornos, echaron por la borda una serie de sentimientos en el momento de los triunfos. Lo más aberrante de todo, parece ser el intento de las autoridades cubanas de culpar a terceros por esta situación. Los acompañantes no son siempre los entrenadores. Muchos de ellos, a pesar de realizar una labor titánica, no obtienen los pasaportes para viajar por ser considerados “blandos”. Me imagino la decepción de los atletas que tienen que quedarse, después de haber entrenado durante muchos años para este evento. Un fuerte abrazo para todos, con la fraternidad de siempre.

Alemania, 20.10.2007.-