Los primeros soldados se empezaron a ver el viernes en la ciudad, dÃas después de que los responsables federales y estatales, incluido el presidente George W. Bush, asegurasen que la ayuda estaba "en camino" para asistir a los damnificados por el huracán "Katrina".
Las tropas llegaron armadas con rifles autom찼ticos M-16 y gigantescos camiones normalmente utilizados para el transporte de tanques, pero que ahora acarrean los suministros que desesperadamente necesitan decenas de miles de refugiados.
Las situaciones que se han encontrado los soldados en los alrededores del estadio Superdome y del Centro de Convenciones de la ciudad, en las que hay miles de damnificados, han sido calificadas de "vergonzosas" por los propios refugiados, equipos de emergencia y politicos como el alcalde de Nueva Orleans, Ray Nagin.
Decenas de miles de personas esperaban agolpadas en torno a estos dos puntos, deshidratadas, hambrientas, enfermas y junto a los cuerpos de los fallecidos, algunos por causas naturales, otros ahogados por la crecida de las aguas, pero tambi챕n muchos otros con disparos, v챠ctimas de la violencia que impera.
A este panorama se sumaron en las últimas horas los incendios en diferentes lugares de la ciudad.
La mañana del viernes empezó con la explosion e incendio de una fabrica de productos quÃmicos a las orillas del rÃo Misisipi, a varios kilómetros del centro de Nueva Orleans. La explosión se pudo sentir en amplias áreas de la ciudad y las llamas iluminaron los cielos en la madrugada, la única luz que Nueva Orleans ha podido ver desde que el lunes la ciudad se quedó sin electricidad.
Otros fuegos prendieron en el centro de Nueva Orleans, tanto en edificios industriales como en residencias, pero los bomberos se vieron incapaces de controlar las llamas ante la falta de presi처n en las bocas contra incendios y la imposibilidad de conducir camiones cisterna por las calles inundadas.
La representante dem처crata Carolyn Kilpatrick se declar처 "avergonzada de Estados Unidos, de mi pa챠s" y critic처 duramente a las autoridades federales por su inacci처n y por permitir que el caos se apodere de una de las regiones m찼s pobres del pa챠s.
El jueves por la noche, el alcalde de Nueva Orleans, Ray Nagin, emitió otro desesperado y emotivo mensaje para que las autoridades federales mandasen de forma masiva ayuda y tropas a la ciudad.
La llegada poco después del mediodÃa del viernes de los primeros soldados de la Guardia Nacional, con suministros, parece abrir una ventana de esperanza para los ciudadanos atrapados en Nueva Orleans. Se espera que más de 7.000 soldados de la Guardia Nacional lleguen en las pr처ximas horas, seg첬n el teniente general de este cuerpo de civiles voluntarios, Steven Blum.
Blum afirm처 que los soldados van para salvar a los ciudadanos del estado de Luisiana y advirti처 de que el contingente militar est찼 preparado para acabar con la violencia que padece la ciudad de Nueva Orleans "de una forma r찼pida y eficiente".
La llegada de las tropas al Superdome y el Centro de Convenciones se produjo pocas horas despu챕s de que los medios de comunicaci처n empezasen a transmitir im찼genes de cad찼veres en los alrededores de estos dos puntos. Asimismo, las cadenas de televisi처n muestran im찼genes de personas, en su mayor챠a de raza negra, que desde esos lugares hacen peticiones desesperados de medicinas, agua y alimentos.
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