Foro Social, un desafio en educación e información

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El balance que deja la cumbre Apec para Chile

Al margen de una serie de incidentes menores entre agentes de seguridad estadounidenses y chilenos, el domingo termin처 con 챕xito en Santiago la cumbre anual de los l챠deres del foro de Cooperaci처n Econ처mica del Asia Pac챠fico (Apec), un evento que empez처 el viernes y que puso punto final a un a챰o entero en que el pa챠s fue escenario de m첬ltiples instancias de di찼logo asociadas a las actividades de este encuentro entre los m찼ximos representantes de las 21 principales econom챠as de la cuenca del Pac챠fico.

Entre las autoridades chilenas, as챠 como en el mundo empresarial, que constat처 como nunca antes en la historia las enormes opciones de negocios que se abren con las econom챠as miembros del Apec (en especial con las asi찼ticas), predomina un ambiente de gran optimismo y satisfacci처n.

Hay razones fundadas para esos sentimientos. A첬n as챠, no ser챠a conveniente que un exceso de triunfalismo hiciera perder el foco sobre las verdaderas dimensiones de lo que ocurri처. Por las cifras del Apec (comerciales, econ처micas y demogr찼ficas, sobre todo) y por la talla mundial de los l챠deres que visitaron la capital chilena, se trat처, sin duda, del evento m찼s importante que haya tenido lugar jam찼s en el pa챠s. Todo lo que se gest처 o trat처 en estos d챠as, aunque tambi챕n a lo largo de todo el a챰o, proyect처 a첬n m찼s a Chile en el mundo y, bien aprovechado, puede contribuir notablemente a acelerar el camino hacia el desarrollo que el pa챠s recorre desde hace tiempo.

Sin embargo, esto 첬ltimo, que lo convierte en un hito hist처rico para Chile, no significa que los encuentros en el marco del Apec hayan sido, en la din찼mica y evoluci처n propios de ese foro, algo extraordinario, una edici처n que marque un antes y un despu챕s, al estilo de los encuentros en los que se determinaron las metas de liberalizaci처n comercial para las econom챠as que lo integran (las conocidas como metas de Bogor, por la localidad de Indonesia donde se acordaron, en 1994). Prueba de esto es que buena parte de los asuntos abordados en Chile seguir찼n siendo tratados el 2005 en Corea del Sur, la pr처xima sede.

Con lo anterior en mente, es posible identificar ciertos aspectos que singularizan en forma positiva los distintos actos del Apec en Chile. Entre ellos, y desde la perspectiva nacional, destacan tres. Primero, que haya servido como vitrina de la estabilidad econ처mica e institucional que caracteriza al pa챠s. Segundo, el ya comentado abanico de negocios que se les abren a los empresarios locales (concretado ya en el cierre de algunas inversiones con montos de capital nada menores) y el impulso al deseo de largo aliento de transformar el territorio chileno en una puerta de entrada de proyectos a su vecindario. Tercero, aunque son procesos que llevan tiempo en marcha, el que esta instancia haya sido escogida para anunciar el consenso en la conveniencia de concretar un acuerdo de asociaci처n econ처mica entre Chile y Jap처n, tratativas que se sumar챠an a las que est찼n prontas a comenzar con China y al acuerdo ya vigente con Corea del Sur. As챠, Chile puede tener pactos con las tres econom챠as asi찼ticas de mayor tama챰o y proyecci처n.

Pero m찼s all찼 de los r챕ditos directos para Chile (que no hacen m찼s que premiar un trabajo de m찼s de una d챕cada de acercamiento diplom찼tico a Asia), los aspectos abordados, que quedaron plasmados en la denominada Declaraci처n de Santiago, tambi챕n tienen lecturas que vale la pena subrayar. Por ejemplo, la prioridad manifestada en impulsar la ronda de negociaciones de Doha de la Organizaci처n Mundial de Comercio (OMC), un organismo que a duras penas logra dar saltos importantes en su meta de liberalizar el comercio mundial. Tambi챕n, que se haya considerado el problema de la corrupci처n; la valorizaci처n de los aportes desde el mundo de los empresarios y la constataci처n de que los TLC, del tipo que sean, pueden contribuir a la liberalizaci처n del comercio global.

No puede dejarse fuera que estos encuentros sirvieron para constatar que un sector de la poblaci처n a첬n no entiende las ventajas de esto. Los 40 mil chilenos que el Foro Social reuni처 el viernes son, as챠, un desaf챠o nada menor, en educaci처n e informaci처n.