lunes, 17 de enero de 2005

Sobre el artículo de Vicente.

Queridos Lumumberos !
                                      Sobre Jorge Lavanderos y los detalles que entregará nuestro amigo y compañero Julián Alcayaga en el futuro, nos quedará la pelicula más o menos clara sobre esta materia. Me dá la impresión que, como dice Marcos Medalla en sus mensajes, la justicia chilena hace tiempo que se puso los pantalones y los tribunales resolverán la culpabilidad o inosencia de este connotado parlamentario y hombre público. Por lo pronto, el redoble de tambores en torno a este tema espinudo, ha llevado a mucha gente a sentenciar a priori al senador, dejándolo como chaleco de mono ante la opinión pública chilena. La mayoría de los cargos en su contra han sido sobreseídos por haber tenido lugar hace más de diéz años, pero quedan otros que tendrá que aclarar la justicia. Ojalá triunfe la mesura y se ventilen los cargos en su contra con seriedad y sobre todo con responsabilidad. Un par de palmaditas en el trasero no necesariamente hablan de pedofília o acoso sexual. De ser así, la mayoría de los jugadores de fútbol europeo tendrían que pasar igualmente por tribunales. Lo mismo es válido para nuestras relaciones con la infancia en casi todo el mundo occidental. Es, en muchos casos, la forma de expresar nuestro cariño con la infancia que nos rodea. No por eso pasamos a la categoría de pedófilos, como ha pasado a ser la costumbre en algunos estados de gringolandia. La pedofília en los oscuros rincones de los templos religiosos, nos han puesto hipersensibles en esta materia. Pero eso no quiere decir que las acusaciones en contra de las inclinaciones sexuales del senador no tengan asidero. La justicia lo absolverá o lo condenará, pero, en el caso de que se trate de un complot y se compruebe su inosencia, el daño a la persona ya está sellado y sacramentado. Churchil decía "yo sé que es mentira o media verdad lo que decimos de este nuestro adversario, pero verdad absoluta es que algo queda en las cabezas de la opinión pública".
En cuanto al artículo de Vicente en la página hermana sobre el desastre económico en el ex campo socialista, recogido en un comunicado de Naciones Unidas, corresponde a la absoluta verdad. Más, cargarle al capitalismo los desaciertos y las tragedias que sufren estos pueblos, sería caer una vez más en posiciones erróneas. La razón central de la miseria, es la miserable gestión de las autocracias del pasado. El despilfarro administrativo y el abuso indescriminado del poder de estructuras omnipotentes. La mayoría de las privatizaciones del potencial indistrial de las naciones del bloque oriental, fueron realizadas por personajes políticos de la administración dictatorial. Sin importarles el futuro ni las implicancias del desmantelamiento y venta de maquinarias y ciclos tecnológicos, sino de perpetuar su propio bienestar, ocultando en bancos occidentales las enormes sumas y escapando de las responsabilidades que llegarían tarde o temprano. Que las encuestas demoscópicas exíjan una vuelta al pasado, no asombran a nadie. Sobre todo cuando la nueva economía no cubre minimamente las necesidades vitales de las poblaciones de estos paises. Los personajes en la nueva administración siguen siendo los mismos, solo que sus familias, en su mayoría, se encuentran lejos de las fronteras de estos paises. Abramovich, por ejemplo, sigue siendo gobernador de un estado Ruso, pero recide en Londres, para administrar los millones Yarureados y el equipo de fútbol Inglés Chelsea. Una de las particularidades humanas es ser olvidadizos. Sería necesario pasar cada dia los documentales de los horrores del socialismo real. Los campos de concentración del "Gulag", los centros de los olvidados de Rumania, los ajusticiados en juicios sumarios en Albania, los asesinados en Bulgaria, en Chegien, en Eslovaquia, en Corea del Norte. Cuando hablo de los olvidados en Rumania, me refiero a los miles de menosválidos encerrados en masmorras, subalimentados y entregados a su suerte, los "pogrones" contra el campesinado Rumano y los miles de muertos durante la asonada que terminó con la dictadura de Chauchesku, etc. Ahora hay muchos que claman una vuelta, sobre todo cuando las condiciones actuales les impiden una vida digna mínima. Los procesos aún están en marcha. Los enquistados en el poder siguen gobernando para la misma mafia, la democratización es solo de palabra, los indicadores macroeconómicos no se reflejan un mejoramiento de las condiciones de vida de sus habitantes, en donde el capitalismo de las grandes naciones industriales esperan el momento para adjudicarse los centros de materias primas más señaladas y acorralar más de cerca, los sueños de gran potencia de Rusia. Esa, en mi opinión, es la realidad concreta que ambula en los estados del ex campo socialista. En cuanto al bienestar de antaño, se trata de los medrugos materiales que recibía el grueso de la población, pero que se encontraban en caída vertical irremediable. Los servicios de salud, de asistencia social, los montos de pensiones y jubilaciones, la construcción de viviendas, la infraestructura, la instrucción pública, la inflación galopante, el desabastecimiento consuetudinario, la defensa nacional, el transporte público, fueron empeorando hasta el extremo del colápso. Fué el dia en que se declaró finalmente el zafarrancho y la hecatombe política fué el resultado natural de los procesos que se perfilaban. Mala memoria. De eso adolecen aun los pueblos de la europa del este. Los indices del pasado hablan de los años sesenta, setenta y partes del ochenta, donde colapsó definitivamente el experimento. Todo se resolvió a espaldas de las masas, incluída la repartija. Nadie estaba politicamente preparado para ponerle atajo al desastre. Nadie salió en defensa de las conquistas populares, todos se quedaron en sus casas esperando que ocurriera algun milagro. El milagro no llegó y no podía llegar. Ahora llegan las nostalgias, pero las nostalgias solo recuerdan lo florido de las sociedades de los iguales, en ningun caso se habla ahora de los procesos que condujeron a la catástrofe. El partido comunista de Rusia habla de la miseria que azota el pais, pero se olvida de examinar sus orígenes. Mala memoria. Los humanos somos olvidadizos, Schuganov tambien es humano. Se refiere a Putin como uno de los más despiadados dictadores del milenio, en circunstancias que tomó la conducción del pais en ruinas. Echo mierda, con todas las instituciones echo pebre, con una mafia omnipotente, imposible de instrumentalizar la democracia sin apelar a una serie de medidas que la sobrepasan. Esa es la realidad y con esa realidad trata el pelao de hacer patria. Quien conoce Rusia y su pasado histórico, sabe que no es siempre posible gobernar con el concepto de democracia al que estamos acostumbrados. Al mismo tiempo, escudados en lo mismo, no será posible aceptar atropellos a los derechos humanos, cerrando paralelamente el tarro solo por tratarse del pais al que todos queremos. Pido disculpas por haberme extendido en el tema. Por lo pronto reciban mi abrazo fraternal, con la esperanza de ver aclaradas algunas de las dudas que nos castigan en este momento.
Ren챕
Alemania, 17.01.2005.-    

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